¿Está desapareciendo el periódico impreso?

Desde que Internet hizo su aparición en escena, son muchos os que han vaticinado el fin de la prensa escrita. Esta es una de las cuestiones que suelen salir a la palestra con más frecuencia en los encuentros periodísticos.Como en todos los debates siempre encontramos posturas muy diferentes en torno al futuro del periódico impreso. De hecho, quienes ven clara la desaparición de este tipo de prensa esperan que para el año 2040 los periódicos en papel tal y como los conocemos hoy habrán desaparecido por completo.

No obstante, este proceso sucederá con más rapidez en los países desarrollados en el que los Estados Unidos serán la primera víctima en 2017, seguidos de Reino Unido, Islandia, Canadá y Noruega. En España, según las investigaciones realizadas,  el periódico impreso tradicional morirá en el año 2024 junto con Nueva Zelanda, al República Checa y Taiwán. En los países de Sudamérica, África y el sur de Asia aún sobrevivirá unos años más, en parte porque es ahora cuando están viviendo su mejor momento.

Las causas de la muerte del periódico impreso debemos atribuirlas al aumento del uso de los teléfonos móviles, del consumo de tablets y e.-readers, a los cambios en los costes de producción y de impresión de los periódicos, a la reducción de la inversión publicitaria que cada vez tiende más hacia Internet, al desarrollo de plataformas abiertas, a la adopción de nuevos mecanismos de monetización y al desarrollo del papel digital.

Y es que Internet ha llegado como una gran oleada, provocando una revolución en los medios de comunicación tradicionales que han comenzado a ver en la red una oportunidad de negocio mucho más lucrativa que la que ofrece el periódico impreso. Pero además, son cada vez más usuarios los que prefieren informarse sobre las noticias de actualidad a través de sus móviles y ordenadores, ya que resulta más económico y más cómodo. Con lo cual aquellos medios que no sean capaces de adaptarse para llegar a donde realmente está su público se verán condenados a morir de forma irremediable.