Como suele decirse, “sobre gustos no hay nada escrito” y es evidente que sobre el arte tampoco. La mejor prueba de ello lo tenemos en las obras del artista extremeño Francisco de Pájaro al que se conoce como el artista de la basura. Y es que solamente necesita cajas de cartón, bolsas de basura, tablas de madera podrida, muebles abandonados… para crear sus originales obras.
A mediados del año 2009 tras una exposición gratuita en la Galería de Barcelona y sin haber vendido ni una sola pintura, solamente vio la opción de pintar en la calle en el soporte más económico que tenía, la basura. Sin embargo, en Barcelona no recibió la acogida que hubiera deseado por parte de las autoridades que le han detenido dos veces por pintar sobre la basura. Es por ello que ha decidido probar suerte en Londres donde hay más sensibilidad por el arte urbano y por parte de las autoridades. En la capital británica su trabajo marca la diferencia tanto por su originalidad como por el lenguaje gráfico que emplea. De esta forma, el artista extremeño ha logrado descubrir su faceta más artística y tener la libertad de pintar sin descanso.
En sus creaciones cómicas e ingeniosas que a veces pueden llegar a resultar bruscas y grotescas, Francisco de Pájaro juega con los desniveles y las formas para crear auténticos monstruos que expresan sus miedos y angustias más profundos. Se trata de criaturas burlonas con cuerpos contorsionados, de brazos largos y estirados como pidiendo auxilio, bocas con dientes desordenados, ojos amarillentos… Pero si estuviera en España, el artista afirma que su obra atacaría sin ningún pudor a los gobernantes, ya que afirma que no puede soportarlos y que se siente identificado con todos aquellos que sufren la crisis en España y con los que se buscan la vida a duras penas cada día en Londres.